Siempre se inicia en la piel,
la ausencia.
Un viento suave roza la epidermis
donde el azul se transforma en nubes;
La nada, tan sutil, ocupa espacio.
No habría movimiento sin vacío.
Cada vez soy menos poeta : a mis casi setenta sigo vivo, casi, a mis setenta. ¿Seré un poeta de tres al cuarto contratado por rimas y sonet...
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