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jueves, 20 de febrero de 2020

El peso que sostiene el vacío.

Yo, que he sido nadie
en ningún sitio,
nadie en la nada,
nombre vacío 
apostado en la frontera.

Voy con el viento,
trastornado,
 las razones tropezando,
vidrio y cobre.

Puerto sin luz 
alguna noche oscura,
oscuridad sin asas
en medio del hastío.

Fachada en busca 
de raíces.
Perdido en el mar,
palpando orillas.

Siempre sombra
sostenida por el peso,
solitaria silueta;
surco y sendero.

Sonido
que se apaga
en el silencio.

Un no saber
que no se sabe.

Pregunta siempre.


Duda en el viento.

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